El presidente Luis Abinader planteó recientemente que una posible reforma fiscal debe incluir la revisión de las exenciones que otorga el Estado y la ampliación de la base tributaria, propuestas sobre las que algunos economistas tienen posturas diferentes.
El exministro de Economía, Planificación y Desarrollo, Isidoro Santana, se mostró de acuerdo en que se eliminen todas las exenciones fiscales, planteando que las políticas de incentivo y promoción del Estado se canalice por otras vías diferentes a la exoneración de impuestos.
Santana afirmó que las exoneraciones se convierten en una brecha mediante las cuales los evasores “se cuelan” para eludir el pago de sus obligaciones fiscales.
“Las exenciones que tienen que ver con empresas habría que eliminarla prácticamente todas y si el gobierno quiere privilegiar el desarrollo de algún sector o provincia del país que lo haga por la vía del gasto público, haciendo asignaciones presupuestarias para mejorar las condiciones en que operan las compañías en esos lugares”, recomendó.
Sostuvo que la situación social, económica y política del país es muy compleja para discriminar las exenciones que se queden y las que se eliminen en una reforma. Dijo que cosas que eran necesarias desde hace algunos años ahora se han convertido en urgentes por la crisis sanitaria, siendo la reforma fiscal una de ellas.
El exfuncionario declaró que la reforma implica ampliar la base de impuestos en general. “Claro está, siempre habría algunas exenciones de ITBIS que por razones más bien sociales y políticas habría que mantener”, puntualizó.
En una entrevista reciente, el jefe de Estado reconoció que hay exenciones que se deben eliminar, ya que cumplieron su propósito. De igual forma, refirió que en una posible reforma hay impuestos que habrá que eliminar, disminuir otros y también extender la base.
“Uno de nuestros problemas es la informalidad, el 56 % de la población no paga impuestos. Somos el penúltimo país en presión fiscal, después de Guatemala. Es decir, somos los que recaudamos menos con relación al Producto Interno Bruto. Eso tiene que ver en gran parte con las exenciones fiscales”, destacó Abinader.
El también economista Henri Hebrard opinó que, en cuanto a la revisión de leyes de incentivos fiscales, hay dos de estas que no deben incluirse: la que crea la zona de desarrollo fronterizo y la de las zonas francas, asegurando que cualquier cambio en ese sentido sería desastroso.
“Ahora, fuera de esos dos regímenes especiales, yo creo es oportuno revisar el resto de las leyes de incentivo, pero con mucho cuidado. Creo que es preciso, dentro de un pacto social, dar una revisión importante a todo el tema del gasto tributario, que supera los 200 mil millones de pesos. Hay que considerar que la mayor parte de eso son las exenciones actuales”, expresó.
Sobre la propuesta de la ampliación de la base tributaria, Hebrard afirmó que la misma tendría un impacto sobre los hogares más pobres, por lo que sugirió que sea acompañada de otras medidas, entre las que citó un aumento salarial, compensar directamente a los hogares del quintil uno y dos a través de transferencias monetarias y a través del gasto público.
“Debemos ver el ITBIS como un instrumento de recaudación, no de justicia fiscal. Aunque obviamente se pueden acomodar cosas, debe haber una canasta básica (exenta). Hay que pensar que la mejor forma de hacer redistribución social no es a través del ingreso, sino del gasto público”, manifestó el economista.
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