Renault, que recortará un 8 % de su plantilla -15.000 personas- para hacer frente a su delicada situación financiera, no reducirá sus capacidades de producción en España ni en Latinoamérica, explicó este viernes su consejera delegada interina, Clotilde Delbos.
En una rueda de prensa para presentar el plan de ajuste con que el grupo francés espera reducir en un 20 % sus costes de estructura en tres años, Delbos indicó que las reducciones de capacidades que preparan no afectarán a sus plantas en España ni a las que tienen en Latinoamérica (Brasil, Argentina, Colombia y Chile).
Sí que se verán afectados Marruecos y Rumanía, donde quedan suspendidos los planes de ampliación, así como Rusia, Turquía, China, Corea del Sur y, sobre todo, Francia.
En este último país no se cerrará a corto plazo ninguna planta, pero hay tres cuyo futuro está en el aire.
Se trata de las de Dieppe, donde se ensambla el modelo deportivo Alpine (con una cadencia muy baja, de 7 unidades al día), la de Choisy le Roi, cuya actividad se va a transferir a la de Flins, y la de Fonderie de Bretagne, objeto de "una revisión estratégica".
Renault recortará su plantilla en Francia en 4.600 personas entre factorías y otras instalaciones, como su centro tecnológico de Guyancourt, en la región de París.
Fuera de Francia, aunque tampoco habrá despidos, los efectivos disminuirán en unas 10.000 personas, sin que la empresa haya querido precisar cuántos en cada país. Y esa cifra se refiere solo a quienes tienen contratos fijos, no a los temporales ni a interinos.
Preguntada sobre la posibilidad de que se desplace la producción de vehículos todocaminos (SUV) de las factorías españolas al Reino Unido por supuestas razones de competitividad, la consejera delegada se negó a entrar ahora en la política de distribución de vehículos. Pero añadió que "no hay que creerse cada rumor" que se publica.
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